Ya se acerca el buen tiempo y con éste el calor. Algunas personas sufren sudoración excesiva en manos, pies o axilas; esta circunstancia constituye un auténtico problema, que se acentúa en esta época, y que suele condicionar mucho la vida de quien la sufre: evitar sacarse la chaqueta para no mostrar abiertamente el problema en las axilas o evitar dar la mano son consecuencias directas que llegan a afectar psicológicamente de forma importante y que hoy ya podemos solucionar.
¿Cuánta gente sufre sudoración excesiva?
Se ha calculado que un 3% de la población sufre algún tipo de exceso de sudoración. Los efectos suelen comenzar en la infancia o en la adolescencia y alrededor de los 20 años, pero sigue afectando a personas de mediana edad. Hay que decir que no es cierto que el exceso de sudor cause mal olor, este olor lo producen las bacterias que aparecen cuando el sudor se acumula durante un periodo de tiempo prolongado.
¿Por qué se produce la hiperhidrosis?
El sudor es necesario para el control de la temperatura corporal. Está regulado por el sistema nervioso simpático. Entre un 0,5 y 1% de la población tiene un inapropiado funcionamiento del sistema simpático, que envía un estímulo exagerado a las glándulas sudoríparas o ecrinas produciendo una sudoración desmesurada en determinadas zonas del cuerpo, así se produce la hiperhidrosis. Se trata de una alteración orgánica, no psicológica como se había llegado a afirmar.
¿Qué factores pueden estimular el problema?
El ejercicio físico, el calor o el frío, el alcohol, café o té, el tabaco, los alimentos picantes o especiados, el estrés, la ansiedad o las emociones fuertes son algunos de los factores que pueden contribuir a desencadenar el problema.
Tratamientos más habituales aunque no muy efectivos
Este tipo de dolencia, hasta hace poco tenía varios tratamientos alternativos: aplicación de cloruro de aluminio (aunque a menudo irrita la piel y la efectividad del tratamiento no va más allá de una semana), baños diarios con jabones con clorhexidina incluso pueden ser necesarias cremas antibacterianas. Existen también alternativas quirúrgicas pero con todos los agravantes que ello conlleva.
La solución no quirúrgica más efectiva para la sudoración excesiva
Ahora que se acerca el calor, y estamos a las puertas de mayo que resulta un mes excelente para tratar de forma preventiva el problema de la hiperhidrosis. Para ello en nuestra clínica disponemos de la mejor solución no quirúrgica: la aplicación de neuromoduladores.
Con ello conseguimos frenar la hiperactividad de las glándulas sudoríparas con una efectividad aplastante mediante la infiltración del producto con unas agujas extremadamente finas, siendo además el tratamiento prácticamente indoloro. Los efectos pueden durar entre 5 meses y un año.
Aunque existe la posibilidad de eliminar el problema de forma definitiva tras varias aplicaciones recomendamos un mantenimiento anual como medida preventiva que nos permitirá disfrutar realmente de la larga temporada de verano.
Hoy ya tienes al alcance de la mano la mejor solución, olvídate del exceso de sudor y disfruta con tu ropa de verano, en tus relaciones sociales y en tu día a día. Si quieres ya puedes.