La aparición de Ácido Hialurónico más seguro para su uso en Medicina Estética ha supuesto uno de los mayores avances.
El Ácido Hialurónico (AH) es una molécula perteneciente al grupo de los mucopolisacáridos, es decir, de los glúcidos. Forma parte del tejido conjuntivo, que es el más abundante del cuerpo humano y sobre él cumple múltiples funciones, entre ellas, retener la cantidad de agua necesaria para mantener la hidratación de la piel. Se trata de una función fundamental si tenemos en cuenta que nuestro organismo está formado en su mayor parte por este elemento.
Tanto el Ácido Hialurónico como el colágeno, del que ya hablamos anteriormente, son dos de los componentes imprescindibles que mantienen la estructura de la piel. El colágeno aporta firmeza mientras que el Ácido Hialurónico hidrata y nutre las fibras.
Esta hidratación natural es la que conserva vehiculiza la comunicación entre células, alimentándolas y mejorando la eliminación de desechos y toxinas. También estimula la renovación natural de los queratinocitos, disminuyendo así la presencia de arrugas y manchas de la edad.
Cuando la persona es joven sintetiza Ácido Hialurónico en grandes cantidades; sin embargo, a medida que envejece, va disminuyendo la capacidad de sintetizarlo. De esta manera, con el paso de los años, van apareciendo síntomas como la deshidratación, ya que las células van perdiendo su capacidad natural de retener la humedad y por ello la piel no puede lucir tan tersa.
Además, al perder la capacidad de producción de Ácido Hialurónico se promueve la destrucción del colágeno y consecuentemente, la pérdida de ambos da lugar a las arrugas en la piel.
En el mercado existen multitud de suplementos que contienen ya sintetizado el Ácido Hialurónico, pero en nuestra consulta le aconsejaremos cuál es la marca de confianza que le conviene y la dosis que su piel necesita. Previamente la Dra. Cristina Villanueva realizará un completo diagnóstico del estado de su piel.