Aprovecha el verano para cuidarte con estos sencillos consejos
El sol, las altas temperaturas, las reuniones familiares para comer… El periodo estival es la época del año en la que más expuesta estás a las agresiones externas, y a los hábitos menos saludables. Pero también es la estación ideal si sabes cómo aprovechar el verano para cuidarte.
Nos pasamos todo el año estresadas por la gran cantidad de tareas que llevamos a cabo en el día a día. Las horas pasan volando y los días se nos escapan entre las manos. Apenas tenemos tiempo para dedicar a nosotras mismas y cuidarnos un poquito. ¿Y cuando llega el verano…?
La época estival debería ser ese momento del año en el que podemos relajarnos un poco más, reflexionar sobre nuestra vida, pasar tiempo con nuestros seres queridos.
Algo tan sencillo como leer un libro, disfrutar de una reconfortante siesta o darnos un baño en el mar y dejar que las preocupaciones se disuelvan en el agua.
Pero si es un buen momento para cuidarnos por dentro, también lo es para hacerlo por fuera.
5 consejos para cuidarte en verano
El cuerpo y la mente forman un todo; lo que sucede en uno de ellos acaba afectando al otro. Encontrar el equilibrio emocional es el primer paso. Pero también hay que cuidar el cuerpo, la piel y nuestro organismo en general.
1. Protege tu piel
El sol en pequeñas dosis es bueno, ayuda al cuerpo a sintetizar la vitamina D. El agua del mar es muy beneficiosa para la piel y aporta oligoelementos a nuestro organismo. Pero también es cierto que durante la temporada estival tu piel está sometida a un mayor estrés debido a las agresiones externas.
Para reforzar sus cuidados en verano puedes exfoliar tu piel de forma periódica; utilizar el producto cosmético más adecuado para tu piel y para esta época del año, con sustancias activas que penetren la barrera cutánea; aplicar una mascarilla al menos una vez por semana; y por último, desmaquillarte siempre, siempre.
2. Hidrátala correctamente
La radiación solar provoca envejecimiento, pueden aparecer manchas y sequedad. Como resultado, nuestra piel presenta un aspecto menos sano y juvenil.
Pero además e tomar el sol en exceso, en verano llevamos parte de nuestro cuerpo al descubierto. La pérdida de líquidos debida al calor, y el mayor contacto del viento directamente sobre la piel pueden contribuir a la aparición de sequedad.
Escoge una buena crema hidratante y aplícala sobre tu piel a diario, varias veces si es necesario. Recobrará su hidratación y con ella su aspecto más atractivo y saludable.
3. Come sano
En verano nos dejamos llevar a menudo y acabamos comiendo de forma excesiva. Picoteamos más porque tenemos más tiempo libre, o comemos de forma desmesurada en reuniones con familiares y amigos.
Sin embargo, el verano es una época ideal para reducir los alimentos calóricos y disfrutar, por ejemplo, de las frutas de temporada.
Las frutas de la época estival se caracterizan por contener antioxidantes, que combaten los efectos de los radicales libres sobre las células y previenen el envejecimiento. Algunas frutas como la sandía o el melón contienen mucha agua que nos ayuda a hidratar la piel y el cuerpo en general.
4. Regálate un relajante paseo
Andar es el mejor ejercicio en muchos aspectos. Te ayuda a quemar calorías y es un buen ejercicio cardiovascular.
Además de sus beneficios desde un punto de vista físico, también te ayudará a relajarte y a encontrar ese equilibrio interior que escasea el resto del año debido al estrés cotidiano.
5. Procúrate un sueño reparador
Uno de los mayores factores antienvejecimiento que existen es el descanso. Dormir ocho horas es el mejor bálsamo natural para evitar que nuestro rostro luzca un aspecto cansado.
En verano procura dormir un poco más de lo normal por las noches. Lo notarás en tu aspecto y también en tu estado de ánimo.
Tienes más tiempo, puedes permitirte echarte la siesta de vez en cuando. Mejorará tu humor y los demás lo notarán.
Ahora ya tienes unos sencillos consejos, ya no tienes excusa. Aprovecha el verano para cuidarte y nos vemos a la vuelta con las energías recargadas. ¡Permítete disfrutar!