En el número del mes de marzo de la Revista Nueva Estética aparece la Dra. Villanueva gracias a Núria Perez Abellán y Alejandra Puig en un artículo titulado “Técnicas de lifting sin cirugía con hilos + fillers + neuromoduladores” que os compartimos a continuación.

“Técnicas de lifting sin cirugía con hilos + fillers + neuromoduladores”

En Medicina Estética, la diferencia entre un buen resultado “fuera de serie” está en las manos del médico: en el dominio de las técnicas, en la mesura y en priorizar la naturalidad por encima de todo.

A continuación, dos especialistas de excepción nos cuentan cómo devuelven la juventud al rostro con resultados equivalentes a un lifting… pero sin pasar por quirófano.

Nuria Pérez Abellan.

Fillers & NEUROMODULADORES

Light Lift: AntiAging Global

La Dra. Cristina Villanueva e la clínica Dra. Villanueva ha diseñado una técnica de rejuvenecimiento global facial, donde a partir de su destreza en la ejecución y su sentido de la estética y la proporción combina las técnicas más avanzadas en lifting sin cirugía, en las que entra en juego los neuromoduladores, para elevar estructuras, y el ácido hialurónico para aportar volumen. A partir de una planificación personalizada al milímetro se potencian los rasgos más bellos, al tiempo que se minimizan e incluso eliminas los signos del envejecimiento, como arrugas, líneas de expresión, descolgamiento y flacidez. Esta técnica de autora es óptima tanto para mujeres como para hombres y es eficaz como tratamiento antiedad en rostro y cuello y como prevención del avance del envejecimiento. Light Lift es un procedimiento mínimamente invasivo que no exige tiempo de recuperación, de hecho se engloba dentro de las terapias lunch time, ya que se realiza en menos de una hora y permite al paciente seguir con su vida normal.

Mapa del envejecimiento

La Dra Villanueva es cirujana plástica y especialista en medicina estética así que conoce perfectamente cómo altera las estructuras faciales el paso del tiempo. Así que le hemos pedido que nos hablé de lo que ocurre en el interior del tejido y cómo se traduce en el exterior. La juventud del rostro se ve comprometida a medida que hacen acto de presencia alteraciones de diferente naturaleza: arrugas, líneas de expresión, manchas, descolgamiento, descenso de la línea mandibular, acentuación de las ojeras, bolsas alrededor de los ojos…

Todas estas alteraciones se hacen visibles en la superficie de la piel, pero su aparición responde a un cúmulo de cambios cuyo escenario principal son los estratos cutáneos intermedios y el plano muscular profundo, donde cambia el equilibrio de fuerzas y los músculos responsables de ejercer una acción en sentido ascendente se ven vencidos por la gravedad haciendo que los rasgos se “vengan abajo”. Por lo que respecta a las capas intermedias, dermis y tejido subcutáneo, se produce una progresiva ralentización del metabolismo celular y un descenso en la producción y en la actividad de los fibroblastos, células responsables de sintetizar tres sustancias determinantes en la juventud de la piel: colágeno, ácido hialurónico y elastina. En la dermis en concreto, tiene lugar un descenso progresivo en los niveles de agua, haciendo que la piel se afine y pierda luminosidad. Por lo que respecta al tejido subcutáneo también padece alteraciones específicas, y es que la grasa, que es más abundante en zonas como mejillas, áreas cóncavas y mentón, disminuye de volumen conforme pasa el tiempo, fenómeno que junto con la pérdida de elasticidad se traduce en la acentuación de la flacidez. Esta grasa no se distribuye de manera uniforme, sino que aparece compartimentada en los denominados paquetes grasos y posee unas estructuras de fijación muy importantes que son los ligamentos. Por eso, conforme se va envejeciendo, este tejido graso no se desliza en bloque hacia abajo, sino que queda retenido en parte por estos ligamentos, haciendo que se marquen surcos visibles. Cada estructura al descender por efecto de la gravedad modifica las que están por debajo y por encima de ella. El conocimiento exhaustivo de la anatomía facial es imprescindible para hacer un buen diagnóstico.

Rejuvenecimiento a medida

La técnica Light Lift enciende de nuevo la juventud en la piel, y lo hace recurriendo a las fórmulas más innovadoras de ácido hialurónico y al uso de los neuromoduladores. Disponer de hialurónicos de alto y bajo peso molecular y de diferentes densidades permite inyectarlos a modo de un filler tradicional, para proyectar volúmenes faciales, especialmente en los pómulos y en los labios, y aplicar una mínima cantidad en puntos precisos y estratégicos para levantar los tejidos descolgados y reposicionar los paquetes grasos. Los resultados de esta acción son la corrección de la flacidez, el tensado de la piel y la desaparición de los surcos profundos (sin efecto voluminizador).

Las infiltraciones, que se localizan a nivel dérmico y subdérmico, se realizan con agujas muy finas o cánulas dependiendo de la zona anatómica, del grosor de la piel y de si se está tomando alguna medicación que pueda provocar un cierto sangrado. La Dra. Villanueva explica que con las cánulas romas hay menos riesgo de morado, menor lesión tisular, menos dolor y también menos inflamación, por lo que las emplea siempre que  es posible, aunque a veces se deben emplear agujas, por ejemplo en los labios, donde la corrección ha de ser muy precisa: en este caso, se punciona la piel con una aguja muy fina en el punto conveniente, para inyectar muy lentamente el ácido hialurónico. Una vez depositada la cantidad necesaria se masajea la zona y se sienta al/la paciente para comprobar el efecto de elevación conseguido. Se procede igual en el resto de puntos que se haya decidido tratar, comprobando siempre el resultado inmediato y la simetría entre ambos lados. Cada zona que se trata, eleva la inferior y superior. Es un tratamiento anatómico, por eso respeta tanto la naturalidad. Para acentuar el rejuvenecimiento y aportar un aspecto descansado se recurre a los neuromoduladores, que inyectados también en puntos estratégicos borra arrugas alrededor de los ojos, elimina el surco del entrecejo, eleva la cola de la ceja, relaja las arrugas de la frente…

Light Lift es compatible con cualquier tratamiento que mejore la calidad de la piel: biorevitalización, láser, peeling… El número de sesiones depende del grado de envejecimiento, y siempre se valorarán los resultados y la necesidad de realizar algún retoque pasadas tres semanas.